Primeros auxilios psicológicos: lo que necesitas saber ahora
Todos hemos vivido momentos difíciles donde alguien necesita una mano amiga. Los primeros auxilios psicológicos (PAp) son esas herramientas simples pero efectivas para ayudar a quien está pasando por estrés, miedo o angustia. No se trata de terapia profunda, sino de ofrecer apoyo inmediato y seguro hasta que la persona pueda recibir ayuda profesional.
¿Qué son los primeros auxilios psicológicos?
Los PAp consisten en acciones básicas que cualquier persona puede realizar: escuchar sin juzgar, validar emociones, ofrecer información clara y conectar a la gente con recursos adecuados. La idea es reducir el sufrimiento inmediato y evitar que la crisis se agrave. Se basan en cuatro principios clave: seguridad, calmar, conectar y empoderar.
La seguridad implica crear un entorno tranquilo donde la persona no sienta peligro. Calmar significa ayudar a regular la respiración o distraer brevemente para bajar la tensión. Conectar consiste en mostrar empatía y dejar que la gente exprese lo que siente sin interrupciones. Finalmente, empoderar es motivar al individuo a tomar decisiones pequeñas que le den control.
Cómo aplicar los primeros auxilios psicológicos
1️⃣ Acércate con calma. Saluda de forma amable y ofrece tu presencia. Pregunta si está bien recibir ayuda, respetando su respuesta.
2️⃣ Escucha activamente. Mantén contacto visual, asiente y repite en tus propias palabras lo que la persona ha dicho para confirmar que la entendiste.
3️⃣ Normaliza la emoción. Frases como "Es comprensible sentirse así" o "Muchas personas reaccionan de esta forma ante una situación similar" reducen el sentimiento de aislamiento.
4️⃣ Proporciona información útil. Si sabes que hay líneas de ayuda telefónica, servicios de salud mental o centros de apoyo en la zona, dáselos. Cuanto más concreto, mejor.
5️⃣ Fomenta una acción pequeña. Puede ser algo tan sencillo como respirar profundo tres veces, beber un vaso de agua o escribir brevemente lo que le preocupa.
6️⃣ Evalúa la necesidad de intervención profesional. Si notas signos de riesgo (pensamientos suicidas, agresividad extrema, desorientación), contacta a emergencias o dirige a la persona a un psicólogo cuanto antes.
Recuerda que tu papel no es resolver el problema, sino acompañar y facilitar la búsqueda de ayuda. No necesitas ser un experto; la actitud empática y la disposición a escuchar son los recursos más valiosos.
En Chile, puedes marcar la línea 131 para salud mental o acudir al Centro de Salud Familiar más cercano. Muchos municipios ofrecen programas gratuitos de acompañamiento psicológico, especialmente para jóvenes y adultos mayores.
Practicar estos pasos en tu día a día fortalece la resiliencia de tu comunidad. Cuando todos saben cómo ofrecer primeros auxilios psicológicos, se crea una red de apoyo que disminuye el impacto de las crisis y promueve un ambiente más sano emocionalmente.
La Universidad de Chile Refuerza la Prevención del Suicidio y la Atención Psicológica de Emergencia
El 4 de septiembre de 2024, la Universidad de Chile realizó una capacitación en primeros auxilios psicológicos en el Auditorio María Ghilardi. Esta iniciativa se enfoca en mejorar la prevención del suicidio y el apoyo a la salud mental dentro de la comunidad universitaria.